Ante el incremento de casos Covid-19 en el departamento y el inicio de la quinta ola, la Empresa Municipal de Servicio de Aseo (EMSA) comenzó a fumigar ayer los centros de abasto para frenar los contagios.

“El propósito es que las personas que vayan a los mercados se sientan seguras porque estos lugares están desinfectados. Sin embargo, recalcamos a la población que el cuidado, también, es de uno mismo, por lo que es importante contar con los elementos de bioseguridad”, dijo el gerente de la empresa, Jorge Zambrana.

Contó que el lunes ante la suspensión de clases por el Día del Maestro, EMSA aprovechó para fumigar las distintas unidades educativas del municipio que presentaron casos de coronavirus.

En los próximos días replicará esta actividad en los mercados del centro de la ciudad como el Calatayud, La Pampa, La Paz, 27 de mayo, entre otros. Luego irán a los de los barrios que sean cerrados. “No tiene sentido fumigar un mercado que sea al aire libre porque ya existe ventilación y circulación de aire. Iremos a los que estén con pasillos o ambientes cerrados”, aclaró.

Finalmente, se procederá con la desinfección de las cárceles que están en la ciudad. Los elementos que se usan para esta campaña son una combinación de nano cobre y amonio cuaternario.

El encargado de la brigada de control de aseo de EMSA, Óscar Rocha, explicó que una vez fumigada la zona no causa efectos secundarios o daños a los comerciantes, transeúntes ni a los productos.

Tiene una duración de 10 días, una vez transcurrido este periodo, la empresa retornará.

La fumigación que se desarrolló ayer en las casetas de la Punata y 25 de mayo duró más de 30 minutos. El equipo utilizado desprende un humo que se esparce alrededor y sólo bastaron cuatro trabajadores.

No obstante, en el centro de abasto se encontró a varias personas que deambulaban si barbijo. EMSA también recomendó a los ciudadanos portar el cubrebocas para protegerse del virus.